Nací en una preciosa ciudad del norte de España, San Sebastián. Soy hijo de empleado de una fábrica y de un ama de casa. Siempre me han educado con valores y humildad, aunque con el objetivo de ser empleado en un buen trabajo, nunca para el emprendimiento.
Hace veinte años conocí a la persona más especial en mi vida, la que hoy es mi mujer y la madre de mis hijos, Tania. Ella fue el detonante por la que inicié el cambio a una mentalidad dirigida hacia el emprendimiento.
En 2004 conocí el Network Marketing, entonces es cuando descubrí mi verdadero futuro. Descubrí el vehículo con el que podría desarrollarme personalmente y profesionalmente sin ningún tipo de limitación. Hasta la fecha, solo encontraba barreras para conseguir mi desarrollo profesional, lo que se traducía en obstáculos para mis sueños y para los de una futura familia.
Recuerdo, como si fuese hoy, una frase de mi amigo José, persona que me presentó esta industria,: «Todo lo que crees a partir de ti, tendrá una recompensa ilimitada». Cuando escuché esto, mi mente «voló» y retomé la capacidad de soñar, cualidad que tenía ya olvidada de hacía muchos años, y tuve una visión, en cuestión de segundos mi mente voló hacia un futuro realmente prometedor.
Después, tuve que volver a trabajar durante 11 años para otros, a los que les muestro mi agradecimiento por el aprendizaje adquirido, pero en 2018 me brindaron una nueva oportunidad. Mi amigo Jonatan Diaz me ayudó a retomar una nueva ilusión. Hoy vuelvo a soñar, vuelvo a viajar con mi familia y me siento muy feliz y agradecido al club al que pertenezco.